Judit Terrats, de 22 años (2003), opuesta del senior femenino de Tarragona SPSP, ha vivido una trayectoria marcada por altibajos, pero siempre con mucha pasión y dedicación por el voleibol. Inició su andadura en el Club Volei Salou, siendo prácticamente una niña, donde comenzó a forjar su amor por el deporte. A lo largo de los años, su camino la llevó a la Blume, donde experimentó una etapa exigente que le enseñó disciplina y perseverancia. Posteriormente, llegó al Club Voleibol Sant Pere i Sant Pau para vivir su primera etapa en el conjunto tarraconense.
Después de un descanso para viajar y replantearse su futuro, Judit ha regresado con más fuerza que nunca al equipo de Tarragona, donde, además de aportar su experiencia, se enfrenta a nuevos retos como pieza clave del equipo.

Los inicios de Judit Terrats
P: Empezaste en el Club Volei Salou cuando eras prácticamente una niña. ¿Qué recuerdas de esos primeros años en el voleibol? ¿Qué te enganchó a este deporte?
R: La verdad es que empecé de muy pequeña. Normalmente, se empieza en los colegios, en pabellones con condiciones difíciles: hace frío, no tienes ni palos para la red y la montas como puedes. Pero me lo pasaba muy bien. Además, jugábamos en rombo, que al principio todas éramos malas. La pelota botaba tres veces antes de que alguien la tocara. Era espectacular. Supongo que lo que me enganchó fue la diversión y el hecho de hacer deporte, que siempre me ha gustado.
Una dura etapa en la Blume
P: Luego entraste en la Blume en tercero de la ESO y estuviste dos años. ¿Cómo fue esa experiencia? ¿Qué te aportó a nivel deportivo y personal?
R: Fue una experiencia bastante dura, pero a la vez muy enriquecedora. Hay mucha disciplina, todo el mundo está ahí para entrenar y mejorar. Aunque sean deportes diferentes, ves que todos trabajan igual de duro. Eso motiva mucho.
P: ¿Cómo era el día a día en la Blume?
R: Todo estaba supermarcado: comidas, entrenos, descansos. No había mucho ocio, pero lo pasabas bien con tus compañeros. Fue una etapa muy buena.
Llegada al Club Voleibol Sant Pere i Sant Pau
P: Al salir de ahí, llegaste al Club Voleibol Sant Pere i Sant Pau. ¿Qué significó para ti formar parte de este club por primera vez?
R: Vine porque ya estaba una compañera mía, Carol Matamoros, y algunas otras que conocía. Tarragona tampoco es muy grande. Elegí Sant Pere porque era el club más cercano que competía en la máxima categoría catalana, Primera Catalana. Y pensé: ¿por qué no? A veces viene bien cambiar.

Experiencia en el Club Voleibol Sayre
P: En la temporada 21-22 jugaste con el Club Voleibol Sayre, pero el proyecto no salió como esperabas y decidiste volver aquí, a casa. ¿Qué aprendizajes te llevaste de esa experiencia?
R: Sí, a veces las temporadas no salen como uno quiere. Venía de la Blume, de temporadas muy exigentes, pero buenas, con gente que competía al máximo. Cuando llevas esta dinámica, esperas que las nuevas experiencias sean igual de intensas, pero no siempre es así. Me llevé un choque de realidad: por mucho que te guste el voleibol, no todo va a salir bien. Aprendí a gestionar los errores y a terminar las temporadas, incluso cuando no son las mejores.
Judit Terrats: «Por mucho que te guste el voleibol, no todo va a salir bien».
Un año de descanso y regreso al voleibol
P: El año pasado decidiste tomarte un descanso para viajar, aunque seguiste entrenando con algunos equipos. ¿Cómo fue ese año? ¿Te sirvió para ver el voleibol de otra manera?
R: Sí, totalmente. Siempre había estado en la dinámica del voleibol. Se me juntó que la última temporada no fue como quería y tampoco tenía claro qué estudiar. Así que decidí hacer las maletas, viajar y aprender inglés, que era algo que tenía pendiente. Pero a las dos o tres semanas ya estaba escribiendo a un club: «Oye, ¿puedo entrenar con vosotros?». Me dijeron que sí y fui entrenando, pero soy muy competitiva y el hecho de no jugar partidos me afectaba. Me daba pereza entrenar sin competir, era como ir a jugar a las canicas.
La vuelta de Judit Terrats a Tarragona SPSP
P: ¿Qué te motivó a regresar? ¿Notaste muchas diferencias con respecto a tu primera etapa?
R: Sí, porque sobre todo en estas edades, los cambios que das a nivel psicológico se notan mucho. Yo antes era la niña pequeña del equipo. Ahora, aunque somos un equipo superjoven, el rol es diferente. Aunque no tengo 40 años como cuando jugaba con Evi o con Ingrid, el rol sigue siendo distinto. Además, en las nuevas generaciones hay muchas juveniles, porque como somos un club pequeñito, se necesita rellenar el equipo. Pero la sensación y todo eso es lo mismo.

P: A nivel personal, ¿cómo valoras tu temporada hasta ahora?
R: Bueno, obviamente, todo el mundo te va persiguiendo por ahí, el ascenso nacional, el ascenso nacional. Pero aquí venimos a entrenar, da igual que seamos 4 u 8. Nos lo intentamos pasar bien. Yo intento aportar toda la experiencia que tengo, la poca experiencia que tengo del vóley, hacia mis compañeras, sean mayores o pequeñas, da igual. Al final, tenemos que ayudarnos entre todas.
Habilidades de Judit Terrats
P: ¿Cuáles crees que han sido tus puntos fuertes y en qué aspectos te gustaría mejorar esta temporada y a lo largo de tu carrera?
R: Mi punto fuerte diría que es mi actitud, porque soy una persona bastante fácil de llevarme con las demás. Las compañeras nuevas, por ejemplo, las pequeñas, que es el primer año que juego con ellas, he conectado muy fácil con ellas. Aunque no es una conexión de amigas como tienen entre ellas, creo que eso ayuda a que ellas jueguen más tranquilas. Una buena conexión con el equipo siempre hace mucho. Y debilidad, sí, hay algunas. No te saco el pergamino porque no acabo. Pero siempre he tenido pendiente mejorar en forma física, ya estoy en ello ahora que tengo un poquito más de tiempo. Siempre hay cosas que mejorar.
P: Como decías, ayudar a las jóvenes es importante para que no estén nerviosas en el campo, ¿no?
R: Totalmente, al final lo importante es jugar con personas que están ahí, cogiendo nivel. De hecho, Veronika es un ejemplo porque ella, al final, es una buena jugadora y está jugando bien, pero el rol que tiene es de colocadora, lo cual implica mucha responsabilidad. Así que tener a jugadoras con más experiencia que te ayuden y te den más confianza a la hora de salir a jugar es fundamental.
P: El equipo está segundo en Liga, ¿cómo estáis afrontando esta fase de promoción?
R: Bueno, sí, estamos segundas en Liga, pero está muy apretado, porque estamos a cuatro puntos de las primeras, empatados con las terceras, a dos o tres puntos de las cuartas. Todo está muy apretado. Vamos en segunda posición, pero no podemos relajarnos. Vamos partido a partido. Nuestro objetivo no es subir a Primera Nacional, lo hemos intentado muchas veces, pero no ha salido. Ahora estamos enfocadas en la promoción y veremos qué pasa. Al final, como dicen, cuando menos te lo esperas, puede llegar.
CV Gavà, próximo compromiso del senior femenino de Tarragona SPSP
P: Este fin de semana os enfrentáis al CV Gavà, ¿qué tipo de partido esperas?
R: Bueno, ya les ganamos en casa. La verdad que jugamos muy bien. Lo que caracteriza a nuestro equipo es que a veces estamos muy bien o parece que jugamos como cadetes. Entonces, el reto es encontrar el punto medio. Si jugamos bien, perfecto. Si las otras son mejores, pues aplaudimos y ya está. Pero lo importante es jugar bien, sin importar el equipo contra el que sea. Damos todo y que el partido se haga como salga.
P: ¿Cuáles crees que serán las claves para llevarnos la victoria?
R: Las claves para la victoria son las que te decía antes: conexión con el equipo, jugar bien, tranquilas, sin presión. Si lo ganamos, lo ganamos, y si no, pues no pasa nada.
P: Cada partido es una sorpresa. ¿Cómo lo ves tú?
R: Totalmente, es que hay muchas sorpresas. Por ejemplo, el Sabadell este fin de semana pasado debía ganar, pero no lo hizo. Hay equipos muy igualados y hay mucha competencia. El primero le puede ganar al último, y viceversa. A veces parece que jugamos como cadetes y otras veces como en la Superliga. Pero eso le pasa a todos los equipos, y lo importante es que vamos luchando, partido a partido.
P: Para terminar, ¿qué mensaje le mandarías a la afición?
R: Pues que nos vengan a ver más, que aquí siempre vemos algunas sillas vacías. Si un domingo o sábado no tenéis nada mejor que hacer, traed la merienda, venid a vernos y que estáis todos bienvenidos. Sobre todo, traed bombos y gritad porque a veces necesitamos ese apoyo.